Actualmente nos encontramos con un gran problema global: la escasez de recursos naturales, consecuencia del cambio climático. Entre ellos, la escasez de agua y el alza del precio de los costes de la energía hacen que sea una de las prioridades a solventar por las empresas.
Ya en 2015, los dirigentes mundiales aprobaron Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, los cuales entraron en vigor oficialmente el 1 de enero de 2016. Con el objetivo de cumplir en los próximos 15 años el fin a la pobreza en todas sus formas, reducir la desigualdad y luchar contra el cambio climático garantizando, al mismo tiempo, que nadie se quede atrás.