¿Qué son los procesos discretos y continuos en la industria?
Proceso discreto y proceso continuo son dos tipos fundamentales de producción en la industria, diferenciados principalmente por la naturaleza del flujo de trabajo y la forma en que se gestionan los materiales o productos a lo largo de la cadena de producción.
Proceso Discreto
Un proceso discreto se caracteriza por la producción de artículos o productos individuales, que se pueden contar y distinguir fácilmente. Cada artículo o pieza tiene un comienzo y un fin claro en el proceso de fabricación. Los ejemplos típicos incluyen la fabricación de automóviles, dispositivos electrónicos y electrodomésticos.
Características del proceso discreto:
Los productos son unidades separadas que se fabrican en lotes o individualmente.
Hay una clara distinción entre una unidad de producto y otra.
Es común en industrias que fabrican productos personalizados o en menor cantidad, como la industria automotriz o la electrónica.
Los productos pueden ser ensamblados a partir de varias piezas o componentes.
Proceso Continuo
Un proceso continuo, en cambio, implica un flujo ininterrumpido de producción, donde los productos se crean sin interrupciones y el proceso no tiene un final claro. Este tipo de producción es típico en industrias que procesan materiales líquidos, gaseosos o granulados, como la industria química, petroquímica, farmacéutica o alimentaria.
Características del proceso continuo:
El flujo de producción es constante y no hay separación visible entre productos.
La producción es masiva, a menudo orientada a la fabricación de productos homogéneos.
Es común en industrias que requieren procesos de mezcla, refinación o reacciones químicas ininterrumpidas.
Ejemplos incluyen la producción de combustible, cemento, acero o productos farmacéuticos.